HABITANTES EN AZCAPOTZALCO, INCONFORMES CON RECONSTRUCCIóN; EXIGEN DETALLES DE OBRA

Habitantes de los edificios 10, 11 y 12 de la unidad habitacional Pantaco, en Azcapotzalco, que sufrieron daños con el sismo de 2017, están inconformes con su proceso de reconstrucción.

Afirman que el Instituto de Vivienda de la Ciudad de México (Invi) les ha pedido que entreguen documentación para iniciar los estudios de suelo y rehabilitación, pero sin indicarles en qué consistirán las obras o cuál será la bitácora de trabajo de la constructora.

Claudia Delgado, vecina del edificio 12, narró a Excélsior que los edificios mencionados “fueron diagnosticados como de alto riesgo de colapso por el Instituto para la Seguridad de las Construcciones; el 11 es el que tiene mayor riesgo”.

Hace un mes y sin previo aviso, llegaron al edificio 11 trabajadores de la empresa Pro-Gpic & Bros SA de CV, que designó el Invi, y comenzaron a realizar “hoyos a la parte de atrás de mi departamento, era un ruidazo espantoso, yo no sabía qué estaba pasando. La verdad sí me espanté”, narró Luz María Hernández.

Margarita Pérez, habitante del edificio 12, añadió que “hace años ya se habían hecho estudios de suelo aquí, pero nunca se metieron con la estructura y ahora dicen que las calas –nombre que se le da a ese tipo de hoyos– son para conocer la estructura de los cimientos”.

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En un recorrido se observó que se realizaron cuatro calas alrededor del edificio 11, dos de ellas ubicadas en esquina y dos en los costados.

Ello, indicó Pérez, les preocupa porque ha estado lloviendo y el suelo se reblandece.

Al respecto, el ingeniero José Nolasco, representante legal de Pro-Gpic & Bros, comentó a este diario que “no se ha hecho algo que ponga en riesgo a los edificios. Y los trabajos están siendo revisados por Ingenieros con la especialidad en geotecnia y estructuras”.

Explicó que el objetivo de las calas es “conocer las características geométricas y de materiales de la cimentación de los edificios”.

En el caso del edificio 12, sus habitantes no permitieron que la empresa siguiera cavando sin antes dar una explicación.

A inicios de mayo llegaron los de la constructora a cavar un hoyo al lado de nuestro edificio (el 12), bajaron mis vecinas y preguntaron qué estaban haciendo. Ellos respondieron ‘vamos a empezar a hacer los estudios’, pero ellas exigieron que hasta que la empresa no entregue un documento que especifique la manera que se va a intervenir el inmueble no se permitiría que hicieran nada, y no han regresado”, manifestó Delgado.

REUNIONES

A los vecinos del edificio 11, desde el 9 de mayo, el Invi les solicitó documentación para firmar un convenio de desocupación y recibir apoyo de renta, mientras la empresa lleva a cabo los trabajos.

Sin embargo, algunos vecinos no han entregado los documentos. Es el caso de Luz María Hernández, quien afirma que sólo estaría dispuesta a hacerlo “si nos dan una bitácora de trabajo”.

Los vecinos indicaron que las juntas con el Invi se han realizado por separado, y la última fue con los habitantes del edificio 12 el miércoles pasado.

Nos dijeron que para hacer los estudios de suelo, primero teníamos que aceptar el crédito y al aceptar ese crédito tenía que ser con la compañía que ellos habían designado que porque eran los expertos.

Les comentamos que de esa compañía tenía malas referencias, pues en la rehabilitación que hicieron en una unidad cerca de aquí, a un año presentaron problemas”, contó Pérez.

Excélsior buscó al Invi para conocer su postura del tema, pero hasta el cierre de esta edición no había respuesta.

PROCESO HA SIDO DIFÍCIL: SHEINBAUM

Durante la entrega de la Unidad Habitacional Gitana 243, en Tláhuac, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, se comprometió a entregar todas las obras de reconstrucción que están pendientes y admitió que el proceso ha sido difícil.

Mi gobierno va a entregar todo, esté yo al frente o no”, expresó.

Detalló que de los 17 mil millones de pesos destinados a la reconstrucción, 12 mil millones se destinaron a inversión en viviendas y el resto “tiene que ver con carreteras, agua potable, grietas, escuelas, mercados y distinta infraestructura pública que quedó dañada por el sismo y que ya ha sido rehabilitada”.

La mandataria capitalina resaltó que en esa unidad habitacional 160 familias podrán regresar a sus hogares a casi tres años del sismo del 19 de septiembre de 2017, pues los inmuebles fueron reconstruidos desde sus cimientos, a través del Programa de Reconstrucción.

En ese sentido, admitió que la reconstrucción “ha sido un proceso largo y difícil”, por diversas razones, entre ellas el abandono de las administraciones anteriores.

-Hilda Castellanos

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