TIPOS DE TUMORES MALIGNOS O BENIGNOS: ¿DESCUBRE SI ESA "BOLITA" ES PELIGROSA?

A la hora de hablar de tumores, es indispensables plantearse dos concepto: tumores malignos y tumores benigno. ¿Cuál es la diferencia? Resulta que la aparición de una "bolita" en el cuerpo, no siempre es síntoma de cáncer. Saber distinguir, entre tumores benignos y tumores malignos, así como sus diferencian es fundamental para tener el diagnóstico y tratamiento adecuado. A continuación, analizaremos los tipos más frecuentes de tumores, junto con sus características más destacadas.

¿Qué es un tumor benigno y cuáles son sus características?

Un tumor benigno es una masa de células que crece de manera controlada y no invasiva. Aunque puede aumentar de tamaño, no tiene la capacidad de propagarse a otras partes del cuerpo, lo que los diferencia de los tumores malignos, describe un artículo de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos. Los tumores benignos suelen estar encapsulados, lo que facilita su extracción quirúrgica completa y reduce las posibilidades de recurrencia.

Foto Getty

También te puede interesar:  Cáncer de mama: causas, síntomas y tratamientos para prevenirlo

Entre las características más comunes de los tumores benignos se incluyen su crecimiento lento y la falta de metástasis, es decir, no invaden otros tejidos. Además, en la mayoría de los casos, no ponen en riesgo la vida del paciente. Sin embargo, dependiendo de su ubicación y tamaño, pueden causar problemas de salud al presionar órganos o nervios importantes.

Tumores benignos comunes son los lipomas (acumulación de grasa), los miomas uterinos y los adenomas, que son tumores en glándulas como la tiroides o las suprarrenales.

Es importante resaltar que aunque no sean cancerosos, algunos tumores benignos pueden transformarse en malignos si no se tratan a tiempo o si ocurren mutaciones genéticas en sus células. Por eso, su diagnóstico y seguimiento médico son esenciales para evitar complicaciones.

Foto Getty

También te puede interesar:  Autoridades advierten por sustancia cancerígena en freidoras de aire

Tipos de tumores malignos más frecuentes

Los tumores malignos, a diferencia de los benignos, son cancerosos y representan un riesgo significativo para la salud. Estos tumores tienen la capacidad de crecer rápidamente, invadir tejidos cercanos y, lo más peligroso, propagarse a otras partes del cuerpo a través del torrente sanguíneo o el sistema linfático, proceso conocido como metástasis, revela un artículo de la American Cáncer Society. 

Existen varios tipos de cáncer que se originan a partir de tumores malignos. Algunos de los más comunes incluyen:

  1. Carcinomas: Son el tipo más frecuente de cáncer y se originan en las células epiteliales, que cubren la superficie de los órganos y glándulas. Ejemplos incluyen el cáncer de pulmón, de mama y de colon.
  2. Sarcomas: Estos tumores malignos afectan los tejidos conectivos, como los huesos, músculos y cartílagos. Aunque son menos comunes que los carcinomas, tienden a ser muy agresivos.
  3. Leucemias: Un tipo de cáncer que afecta a la sangre y médula ósea, impidiendo la producción normal de células sanguíneas. No forman masas sólidas, pero son malignos y altamente invasivos.
  4. Linfomas: Se originan en el sistema linfático, una parte crucial del sistema inmunitario. El linfoma de Hodgkin y el linfoma no Hodgkin son los tipos más conocidos.
  5. Estos tumores malignos requieren tratamientos más complejos, como la quimioterapia, la radioterapia o la inmunoterapia, dependiendo de la etapa en la que se detecten y su agresividad.

Foto Getty

También te puede interesar: Kate Middleton ya no recibirá más quimioterapia: “Voy a hacer lo que pueda para mantenerme libre de cáncer”

Diferencias clave entre tumores benignos y malignos

Existen varias diferencias fundamentales entre los tumores benignos y malignos, y comprenderlas es crucial para el diagnóstico y tratamiento adecuado. Las principales diferencias son:

  1. Crecimiento: Los tumores benignos crecen lentamente y suelen mantenerse localizados, mientras que los malignos tienden a crecer de forma rápida e incontrolada.
  2.  Invasión: Los tumores benignos no invaden otros tejidos ni se diseminan a otras partes del cuerpo. En cambio, los tumores malignos tienen la capacidad de invadir órganos cercanos y hacer metástasis, lo que complica su tratamiento.
  3. Recurrencia: Los tumores benignos, una vez extirpados, rara vez vuelven a aparecer. En contraste, los malignos tienen una alta tasa de recurrencia, especialmente si no se eliminan completamente o si ya han hecho metástasis.
  4. Tratamiento: Mientras que los tumores benignos a menudo solo requieren una intervención quirúrgica sencilla, los malignos necesitan tratamientos más intensivos, como quimioterapia, radioterapia y, en algunos casos, trasplante de médula o inmunoterapias.
 

Es fundamental acudir a un médico ante cualquier crecimiento anormal en el cuerpo. El diagnóstico temprano mediante pruebas como biopsias, resonancias magnéticas o tomografías computarizadas puede marcar la diferencia en el pronóstico y tratamiento de estos tumores.

2024-09-18T20:46:46Z dg43tfdfdgfd